Las Noches de Nochebuena Por Sergio Nochebuena: Cuarentena, una oportunidad para dar sentido a tu vida

Por Sergio Nochebuena (Desde Ciudad de México)

Síguelo en IG.

Todo lo que vivimos es un espejo de lo que necesitamos aprender. El coronavirus nos enseña, con su capacidad de exterminio, que si seguimos mirando para otro lado de nosotros mismos, de los afectos, compañeros y la familia, el mundo se va acabando poco a poco. La cuarentena nos obligó a encontrarnos con nosotros mismos. Nadie está exento de que en el proceso de conocerse a sí mismo, no le agrade lo que encuentra. Las circunstancias en torno a un virus innombrable, nos llevan a espacios de conversión, un momento crucial para interrogarnos, crecer, cambiar, transformar y convertirnos en mejores personas. 

La situación que acontece ha roto nuestra rutina por completo, es posible que tu equilibrio emocional se vea desafiado al darte cuenta de que la guerra más grande no está ahí afuera, sino adentro de tu hogar o metro cuadrado sobre el que tienes total poder.

Es enorme la cantidad de personas que se quejan en redes sociales por tener que permanecer en sus casas durante un prolongado periodo de tiempo, sin embargo, me parece que este es el momento de llevar a la acción todo lo que posteas en memes de motivación, mantente más enfocado y aprendiendo mucho del proceso interno.

Es verdad que estamos viviendo una de las situaciones más extremas e impredecibles de la historia reciente mundial. La pandemia del Coronavirus exige el confinamiento de millones de personas en numerosos países como principal medida de contención, por lo que debes poner en marcha algunas pautas para disminuir las consecuencias generadas por este confinamiento. 

En este sentido es necesario cuidarnos psicológicamente para prevenir que derive posteriormente en trastornos de tipo emocional, como problemas de sueño, ansiedad o depresión, luego que dejaste de ver a la gente que veías diario, de recorrer tu camino habitual, de escuchar tu despertador o esperar el transporte público. 

Es importante aprender a vivir el aislamiento como una oportunidad para ponerse en contacto con la propia interioridad, sin temor y abandonando cualquier actitud crítica hacia ti mismo. Ya sé que estar en cuarentena implica una nueva dinámica en tu día, pero te invito a que aproveches este receso para integrar hábitos saludables como conversar más con tus seres queridos, ya apaga un momento tu celular, desintoxícate un poco, cierra tus ojos y respira algunos minutos sin prisa, si te gusta también puedes encender algún incienso  y poner música suave (como a mí me encanta hacer esto yo ya lo hacía desde antes de la cuarentena), vuelve a ti, a la afectividad que tenías abandonada, sin la necesidad de aparentar, sin comunicaciones violentas.

Por lo regular sentimos que una buena compañía tiene que provenir de los demás. Debo decirte que esto no es cierto. ¿Has probado a sentirte acompañado por ti mismo? Prueba un rato todos los días, con los ojos cerrados o como tú gustes, lo importante es sentir, en el momento presente, tu presencia, tu cuerpo en contacto con lo que te rodea, tus sensaciones físicas, tu respiración, el ritmo de tu corazón, a ti mismo, mientras dejas que los pensamientos pasen frente a ti sin detenerte en ellos. Esto es meditar.

También puede que descubras algunas habilidades que necesitas para comunicarte mejor con tus compañeros de trabajo, tus hijos, tu pareja, ser empático, tener paciencia, y dirigirte cortésmente a los demás, entre otros aspectos.

En medio de la pandemia de estos días, el coronavirus viene a desafiar muchas creencias que tenemos acerca del mundo. Reflexiona por un instante: ¿Necesito aislarme de situaciones y relaciones que ya no me funcionan? ¿Tiene que venir un virus fuerte para darme cuenta de lo efímero que es el paso por el mundo? ¿Es acaso un episodio pandémico lo que necesitamos como humanidad para empezar a cambiar todo lo que daña nuestro planeta?

Y cada uno podría seguir preguntándose y reflexionando acerca de esto, y qué bueno, aprovecha para meditar en la vida que deseas llevar, en la persona que quieres ser, y en los valores que quieras cultivar. Esta es una oportunidad perfecta para recuperar ritmos más humanos y aprender a escucharse y escuchar a los demás. 

Nunca pierdas de vista tus hábitos, la estructura de vida que llevabas, porque de ello dependerá que tu autoconcepto no se vea afectado. Creo que es conveniente que expresemos cómo nos estamos sintiendo emocionalmente con esta situación, tal vez aparezcan diferentes estados emocionales cambiantes.

Date cuenta cómo debido al agitado ritmo de la vida que llevamos, de las miles de ocupaciones, del cansancio… hemos perdido muchísimos momentos para consentirnos. El tiempo de cuarentena también nos lleva a encontrarnos con la familia, de quienes también nos hemos ido alejando inconscientemente debido a múltiples factores. 

Y si después de todo esto una pareja se da cuenta de que hay demasiadas incompatibilidades y el amor ya no es suficiente, me parece que será una excelente oportunidad para mirar la realidad con nuevos ojos y actuar en consecuencia.

Sin embargo, no me parece que todo sea malo, si te das la oportunidad más allá de la pandemia, no volveremos a ser los mismos, ni como personas, ni como profesionales ni como empresas. Habremos aprendido lecciones muy valiosas que nos acompañarán el resto de nuestra vida. 

Ponte buzo y no te abandones ya que poco a poco, sin ser muy conscientes, puede llegar la apatía, la tristeza y la depresión puede comenzar a instalarse en ti. No lo permitas. Abandonarse lleva inevitablemente a sentimientos de vacío y devaluación personal. No olvides que sigues activo, que debes seguir activo para sentirte bien, manteniendo el objetivo bien trazado de quién eres y de lo que quieres.

Repasa cuál es tu propósito en la vida, ten muy presente lo que tienes y lo quieres conseguir, plantéate pequeñas metas diarias, valiosas para ti. Por favor, no dejes de tener un objetivo en cada momento del día, sin perder nunca de vista hacia dónde vas y lo que más quieres en la vida. 

Una cuarentena solo puede causar pavor a quien no sabe qué hacer con su tiempo, con su vida. Cuídate mucho y te mando un fuerte abrazo.