EN PRIMERA BUTACA por LENNA GUZMÁN: ¿DÓNDE ESTÁ MI ENTRADA?

Llegó el 2020 para el mundo cinematográfico y con ello, la trigésima cuarta edición de los Premios Goyas, los más prestigiosos de España y Latinoamérica, que por cuarta vez en su historia,  trasladó la ubicación habitual de Madrid, para desplazarse esta vez a Málaga. 

En la fiesta del cine, durante los días previos a la cita, se instalaron en las calles de Málaga, exposiciones, audiciones y conferencias, junto con la proyección de las principales películas nominadas en los cines. Se vivieron grandes días de ambiente festivo previos a la gran cita. El público de Andalucía, como siempre, estuvo al nivel de lo esperado y tuvo una masiva y fiel respuesta.

Comentar que ha sido la gala más grande, la más mediática  y la que mayor espectación ha generando en la historia de los premios, con más de ocho mil espectadores en la Ceremonia. La locura definitivamente llegó y hubo gente que por una entrada pagó la friolera cifra de 1600 Euros. 

Este año hubo dos novedades. Se eliminó el segundo corte para que mayor número de candidatos pudiesen acceder a las nominaciones. Y como segunda novedad se amplió de tres a a cuatro el número de nominados.

Destacar, que una vez más, los candidatos a los Goyas no fuimos invitados a la ceremonia, que por naturaleza hemos cimentado siempre. La ilogica se impone de nuevo. Han ganado políticos y empresarios, quienes gracias a su poder fueron invitados por puro trámite. Aquí como en la vida, vence el más poderoso. Con paz les digo que disfruten de la ceremonia con total agrado, y que gracias a ellos, me he ahorrado el dinero de ir y venir (Risas).

Mi nombre es Lenna Guzmán, soy cantautora y actriz, y seguramente me conocereis del polémico apartado, Oscuras Reflexiones que escribo aquí en La Revista Diversa, pero esta vez el tema va de cine y aquí me teneís en la PRIMERA BUTACA de La Revista Diversa no de los GOYA. Ha sido mi primera participación en los premios de la Academia del Cine Español y me siento muy feliz de haber llegado a los premios, por que no es fácil, y mucho menos siendo una persona trans como yo. 

Trabajar en Tal como soy, aportando tu propia canción es motivo de gran satisfacción, pero si a esa película le añades el salir cantando y actuando como actriz, el orgullo se incrementa más. El culmen fue recibir la noticia de que era candidata a los premios Goya en la categoría como  Mejor Canción Original y tener que competir con artistas de la élite, como Alejandro Sanz, Rosalía, Rafael, Andrea Calamaro, eso si que me llenó de orgullo. También  me siento muy realizada al haber representado a mi colectivo transexual y me encantaría que algún día nos recompensen mucho más.

Destacar que sobretodo me quedo con la labor pedagógica excepcional que hace la película, capaz de enfocar con profundidad y cruda certeza la problemática de una realidad compleja ubicada en los menores trans. El filme de Tomás Aceituno entrega un mensaje inclusivo determinante y lleno de esperanza.

Me siento muy orgullosa  de nuestra labor humanitaria, capaz incluso de salvar vidas. Por mucho que pasen los años, la recompensa sigue estando ahí, seguiremos salvando vidas humanas, sobretodo en Latinoamérica. No puedo pedir nada más. Bueno sí, una entrada o mi acreditación como periodista que vamos soy columnista en esta publicación digital (Risas).

Post data:  La conclusión a la que puedo llegar y con la que cierro el artículo, es que el cine de autor, seguirá dando lecciones humanitarias a la potente industria cinematografica, por que el poder no radica en el dinero, sino en el corazón. Muchas gracias.