FANGORIA en primera persona


"Nadie te puede quitar el placer de hacer algo

como tú crees que debes hacerlo"

Fangoria se trata del grupo español de música electrónica más prestigioso del mundo. Formado por la carismática María Olvido Gara Jova  (Ciudad de México, 13 de junio de 1963), —–más conocida por su pseudónimo Alaska y por Nacho Canut enigmático y elegante como pocos creativos, quien se encarga de los teclados, del bajo y, como un gran Rey Midas, de darle vida y sentido a cada uno de los acordes de su admirada y querida compañera. La andadura de Fangoria que se conecta con el movimiento neo-hippie de otras grandes formaciones como Dee-Lite o B-52 comenzó de manera abrupta e incomprendida por una industria discográfica, allá por 1990, que no supo encajar la magnífica evolución profesional de dos artistas que, ya entonces, demostraron ser absolutamente modernos, arriesgados e independientes. La medida perfecta de la inteligencia es la perfecta habilidad para cambiar y, por ese motivo, lejos de amedrentarse tras su ruptura contractual con el desaparecido sello EMI-Hispavox, los componentes de Fangoria comenzaron a gestar y dar forma a un futuro construido a su gusto y medida que, con el tiempo, se ha convertido en un impresionante y aplaudido presente; en todo un legado para generaciones futuras. Las canciones y temáticas que componen su amplia discografía son de lo más variopintas: algunas son negativas, chismosas, irónicas, exageradamente pesimistas, vengativas, odiosas, dramáticas o rencorosas. Otras son prácticas, encantadoras, alegres, odas a la esperanza, coloridas, exageradamente positivas. El drama y el baile, la oscuridad y la conexión espiritual, las sonrisas y las lágrimas, el canto sensible y el desencanto horrible se visten y desvisten en cientos de temas con los que Fangoria invita a miles de seguidores a no perder la complicidad que les unen desde hace décadas:

Celebración y autodestrucción declara Nacho Canut. Olvido habla de superficialidad y mundos sintéticos; yo escribo las partes de las canciones donde se atisba que todo eso lleva también a un callejón sin salida. Por edad y por trayectoria añade Alaska hemos llegado a un punto en el que ya no nos apetece esforzarnos por no decir lo que pensamos”.

Desde el año 1999 Fangoria ha vendido alrededor de 15 millones de discos en todo el mundo. Canciones como Espectacular, Fiesta en el infierno, Dramas y comedias, Ni tú ni nadie, Absolutamente, Más es más, Electricistas, No sé que me das, Retorciendo palabrasEn la Disneylandia del amor, Miro la vida pasar, Criticar por criticar, Geometría polisentimental o A quien le importa fastuoso himno gay internacionalhan llevado al grupo a ser un número 1 retratado en medios tan importantes como Rolling Stone, Zero  o Psicologies. Las giras de este verdadero equipo de profesionales se suceden, de forma continuada e imparable, en países como Estados Unidos, México, España, Argentina o Japón. El 4 de enero de este año, se anunció el lanzamiento del disco Miscelánea de canciones para robótica avanzada. Esta nueva propuesta musical de Olvido y Nacho se compone de 4 canciones inéditas, un remix/mash-up y un medley; además de las canciones ya contenidas en Canciones para robots románticos. Antes de la presentación de su primer single, titulado Espectacular, el nuevo trabajo de Fangoria ya había sido certificado como disco de oro. Está claro que estamos ante dos profesionales como la copa de un pino. Dos grandes estrellas y un mismo camino dotado de una brillantez conceptual, de una compactación sonora envidiable y de una personalidad arrebatadora que sólo permite una expresión tan directa como realista para cerrar la presentación de esta entrevista concedida para Onda Verde Radio y La Revista Diversa. El buen gusto sin ambición es un pájaro sin alas. Pretender ser normal aburre y, entonces, como hicieron en su momento Alaska y Nacho, se hace necesario volver a ser uno mismo ¡Larga vida a Fangoria!

        Vuestros grandes éxitos denotaban cierto desencanto hasta que comenzasteis una nueva etapa en Fangoria más positiva; con discos redondos tan espectaculares como Cuatricromía, Policromía, Canciones para robots románticos o su estupenda revisión Miscelánea de canciones para robótica avanzada ¿Qué tiene el desamor y el amor que siempre han sido tan especiales para vosotros?
                                                                                
Fangoria nunca ha tenido pesimismo, de hecho, cuando publicamos Una temporada en el infierno en el año 1999, Nacho y yo nos encontrábamos en un momento maravilloso de nuestras vidas  explica Alaska. Quizá pudiese parecer que éramos incapaces de hablar del amor y los sentimientos,  más allá de un punto de vista como dramático, pero se trata de que Fangoria somos como muy teatreros.
-        


      Alaska, dicen que quien mucho abarca poco aprieta pero tú has anulado el sentido de la frase embarcándote en mil y una historias. Tus canciones se convierten en himnos internacionales, te involucras en infinidad de acciones sociales, triunfas en el teatro, el público te ama y venera más allá de la pantalla de televisión; luchas como nadie contra las injusticias que golpean nuestro mundo, has escrito libros, te has licenciado en varias carreras universitarias; incluso le has transmitido a tu madre quien en fecha reciente presentó un magnífico libro de memorias esa fuerza que tienes por vivir y disfrutar nuevas experiencias; que ya es meritorio que una influya en su propia madre sin manipularla. Hija, a ti de pequeña te dieron mucho Cola Cao para desayunar…

Sí, tomé mucho Cola Cao sonríe sorprendida por el jocoso comentario. Todo lo que hago me gusta y tengo la enorme ventaja de no tener un trabajo que me ocupe un número determinado de horas todos los días de mi vida aunque hace un inciso, tengo la desventaja de que mi profesión me ocupa todo el día. No soy como esa persona que a las ocho de la tarde cuelga y puede dedicarse a otro tipo de vida responde aceptando su realidad. No tengo un sentido del trabajo muy desarrollado y  para mí presentar un disco es exactamente lo mismo que irme, en un momento dado, a una manifestación o apoyar el Día del Orgullo Gay. No considero trabajo ni lo uno ni lo otro sino parte de mi vida asombra su expresividad e inteligencia. Hago lo que me gusta y por eso puedo hacerlo todo aunque vuelve a puntualizar vaya en detrimento de mis horas de sueño o de mi vida personal… ¿De dónde saco mi tiempo?... Pues del cine… Dejo de ir al cine esta semana para hacer  no se qué… se resigna con mucha simpatía, el caso que no me puedo quejar porque como todo lo que hago lo hago porque me gusta… Siempre llego a la conclusión de que necesitaría que el día tuviese más horas me arranca una risotada con su inmensa y cómplice sonrisa.

-         El mundo está asistiendo a una época convulsa. ¿Has sentido alguna vez la imperiosa necesidad de hacerte monja y recluirte en un convento para alejarte de la realidad de tu entorno?

Recuerdo con especial hincapié los años 1992 y 1993 contesta de manera inmediata. No llegué a tanto como pensar en meterme a monja; entre otras cosas porque en un convento se impone el celibato y eso  abre los ojos– siempre ha sido contrario a mis creencias; pero sí necesité alejarme de mi vida de aquel entonces. Pero lo hice sin cometer el error de poner kilómetros de por medio. Siempre me ha encantado la idea de tener un paraíso terrenal donde disfrutar de mis momentos de soledad pero no lo tengo.

-         ¿Cuántas personas te han sujetado el bolso y han saltado a la fama?

No se me ocurre nadie, de verdad te lo digo, que por el hecho de tener relación conmigo o con Fangoria pueda ser famoso o famosa asegura con gran seriedad. Si es cierto que, tanto Nacho como yo, tenemos muchos amigos y conocidos con quienes hemos tenido contacto en determinados momentos de nuestras vidas y, con el tiempo, se han hecho populares. Desde grupos que han tocado con nosotros hasta artistas con quienes hemos trabajado porque nos gustaba mucho lo que hacían, o amigos que han terminado en televisión o escribiendo libros con mucho éxito me guiña un ojo, pero eso es algo muy normal. Nosotros comenzamos en el mundo artístico siendo muy jóvenes; tan jóvenes que ni siquiera teníamos edad para dedicarnos a una profesión. Esto nos ha permitido ver como mucha gente se han ido desarrollando a nivel profesional hasta el punto de que incluso nos han podido echar una mano a Fangoria.

-         En ocasiones fuisteis descritos como personas frías y distantes ¿La gente tiende a reflejar en los demás sus propios fracasos?

Los retratos que hagan los demás de una misma, incluso con la mejor de sus intenciones, resulta inexacto necesitaría días para seguir disfrutando de la sapiencia de ambos genios. Los fans a veces quieren ver en el artista lo que no es el artista. Cuando yo tenía 12 años David Bowie para mí era Dios y llegó un momento de mi vida que dejó de interesarme todo lo que hacía. La culpa de este desinterés no la tuvo Bowie; la culpa fue mía… Ni siquiera deberíamos hablar de culpables… David Bowie hacía lo que le daba la gana… A la gente nos podría parecer mejor o peor pero él debía seguir su camino sus palabras obnubilan a cualquier profesional que se precie. Cuando analizas a un personaje que sólo conoces por los medios de comunicación tiendes a cometer todo tipo de errores. Yo los cometo se sincera en todo momento y tengo mi propia versión de muchos personajes que, estoy segura, nada tienen que ver con mi visión personal porque no les conozco. De todas maneras, mientras que no se trate de alguien que a mí de verdad me importe, me da igual lo que se diga sobre mi persona… incluso lo que sea bueno…

-        
      
      El panorama creativo de nuestro país está herido. Muchos artistas tienen que emigrar a países lejanos para abrirse camino ¿Qué consejo le daríais a esas personas que sueñan con llegar tan alto como Fangoria?

Algunos mensajes no pueden ser ni positivos ni crudos gesticula con ambas manos mientras posiciona el cierre de esta entrevista. Si fuese muy positiva mi respuesta sería realista y, por otro lado, si fuese muy negativa mi respuesta también sería realista. Nadie te puede quitar el placer de hacer algo como tú crees que debes hacerlo. Si te llega en la vida un batacazo, ese batacazo te lo das tú y, créeme, de ellos se aprenden mucho. Quizá porque soy muy cabezota o he tenido suerte o me la he sabido buscar en esta vida, nunca me he pegado un golpe por hacer algo que los demás me han impuesto. La gente que tiene ideas muy claras y quieren llevarlas adelante deben hacerlo. Siempre aconsejo estas palabras a los profesionales, no solamente artistas, que comienzan a forjarse su futuro, a darle forma invita a la reflexión. Pero no solo eso. No basta con que tus éxitos y fracasos te pertenezcan. Si sólo los vas a compartir con tres personas es mejor preparar una merienda con Cola Cao y disfrutar entre amigos. Vivimos de lo que hacemos y vivimos de lo que somos gracias a los demás. Tenemos que llevar las riendas de nuestras vidas pero también debemos ser agradecidos y generosos.




©Archivo fotográfico La Vanguardia, Vanity Fair, Warner Music. Todos los Derechos Reservados.

Comentarios